Tras la partida de ayer, formada por dos partidas simultáneas en dos dungeons conectados, con 2 grupos de 5 héroes con sus respectivos jugadores oscuros dirigiendo el cotarro, aquí está la descripción de lo sucedido en uno de los dungeons:
GRUPO RÍO:
El segundo grupo de héroes decidió acceder a través del río subterráneo a las entrañas del castillo. Formado por un bárbaro con arma a dos manos, un guerrero enano con 2 armas de mano, un cazador de brujas armado con espada y un arcabuz, un enano explorador experto en detectar y desactivar trampas, y una hechicera elfa, abrieron la rejilla que les permitía acceder a una de las salas del castillo. La sala contigua estaba infestada de murciélagos que la hechicera ahuyentó con un sortilegio de bola de fuego. Después continuaron explorando. Tenían sus roles bien asumidos y avanzaban con cautela. Primero, el enano explorador procuraba detectan posibles mecanismos sospechosos de contener trampas, tanto en las baldosas del suelo que les precedía como en las puertas que atravesaban. Abrió con sigilo la mayor parte de las puertas cerradas con llave. En la sala de la forja hallaron solo un arco útil, pues casi todo el armamento estaba oxidado y en malas condiciones. Allí hicieron frente a unos pocos enemigos. Orcos y goblins poblaban este sector. Más adelante encontraron un pasillo cuya desembocadura los inquietaba. Un muro de hielo cubría la continuación al doblar una esquina, y tanto el bárbaro como el guerrero enano se dedicaron a dar mandobles contra el mismo. Al derribarlo descubrieron que al fondo del pasillo había un golem con una esfera de rayos electrizados a sus pies esculpidos en piedra. Pero mientras tanto, el enano explorador había decidido abrir otra puerta acompañado de la hechicera y el cazador de brujas, hallando en el interior de aquella sala a un enorme troll y varios orcos que se lanzaron al ataque. Los héroes tuvieron tiempo de cambiar sus posiciones. los guerreros taparon el pasillo para aguantar el embate de los enemigos, mientras el cazador de brujas les apoyaba con disparos de arcabuz. Sin embargo, la hechicera optó por acercarse al golem, apenas seguida por el explorador. Ella descifró el mensaje que se dibujaba en la superficie electrizada de la esfera. Pronunció la palabra mágica élfica "Pollon" y un mecanismo se abrió en el faldón de piedra del golem, cuyo glande era en realidad una esmeralda engarzada que la elfa se apresuró a sujetar. Por fortuna, el golem cobró vida pero erró el primer golpe y ella pudo huir, mientras sus compañeros terminaban con el troll y los demás enemigos y finalmente cubrían la huida de la elfa, que corría con la esmeralda dentro de su zor... zurrón. Aniquilado todo peligro, vieron los cadáveres de un hobbit y una joven humana en el interior de unas celdas. Tras estos contratiempos, continuaron adelante. Hallaron una sala cubierta de grandes hongos. La elfa no dudó en comerse el primero de ellos. Era muy grande pero pudo engullirlo sin problemas. Sus compañeros (incluido el celoso bárbaro, que la deseaba), advirtieron que no era la primera vez que comía hongos como aquellos...
Poco después hallaron una sala con varios armarios y bibliotecas, además de unas escaleras que finalmente decidieron no recorrer. En ese instante vieron a un hobbit que descendía las escaleras hata ellos, a toda prisa. Les dijo que todos los compañeros del otro grupo estaban muertos o inconscientes, así que decidió unirse a ellos. Tras desactivar varias trampas y sortear una grieta que tuvieron que sortean con la ayuda de varios cordajes, localizaron una sala donde había un prisionero elfo y un mago: ¡el hechicero que buscaban rescatar! Aunque el enano explorador no pudo desactivar con éxito la trampa electrificada de la cerradura de la celda, tampoco murió chamuscado y lograron su objetivo. Luego decidieron continuar hacia el camino que previsiblemente conducía a la sala de gesta. Tuvieron que atravesar un muro de fuego para lograrlo. El hechicero y el elfo rescatados decidieron esperar en el cruce, sin traspasar el muro. Al abrir las puertas de doble batiente de la sala de gesta, los héroes encontraron una amplia sala donde los aguardaban varios personajes poderosos. Un hechicero goblin, un shamán orco y un caudillo orco, además de tres orcos negros y cuatro guerreros orcos, ocupaban la sala, y no dudaron en plantar cara para repeler a los intrusos. El combate fue épico, hubo momentos en que pensaron que todos los héroes iban a perecer, pero finalmente la fortuna les sonrió y lograron acabar con todos sus rivales. El enano explorador pereció en el combate tras quedarse en una esquina empleando su arco y recibir la carga de un orco negro. El halfling estuvo a punto de perecer también, del mismo modo que el bárbaro, que reprochó a la elfa que tardase tanto tiempo en sanar sus heridas con el último sortilegio, dado que estaba enfangada en un combate a bastonazos con el shamán orco. Y hasta aquí lo realizado por los héroes con los que me enfrenté como Jugador Oscuro
