


Pero yo que tú perdería veinte minutos en igualar los tonos de las pieles.
Lo tienes muy fácil. Prepara una "aguada" con el color con el que has pintado la piel de los nuevos.
Y una aguada es... una pintura muy aguada. Hasta que tenga la consistencia de una tinta y transaparente directamente. De hecho es mejor probar primero aguando mucho. Y luego coges con el pincel y con cuidado lo pasas por la piel como si fuera un lavado (es decir, con cuidado de que no se vaya la mezcla por donde no quieres).
Te va a costar muy poco rato y unificarás el tono. Porque el que le has dado tú es muuuucho más chulo que el que tenían antes.
Bueno, yo ahí te lo dejo. Si al final te atreves y tienes alguna duda pregunta. Que siempre es mejor estar seguro antes de que el resultado sea irreparable.
