Bueno, a ver, sí y no, matizando.
Conocer tu lista, sus debilidades y fortalezas, y tratar de aprovecharlas al máximo jugando con conceptos que en fantasy o 40k no se usan, como es, especialmente, la colocación del terreno, no creo que pueda llamarse exactamente ser un culoduro. Es lo que cada cual intenta a su manera, creo yo; y en CoE, como puede pasar en casi todos los juegos, el que tiene un buen conocimiento de las reglas tiene una ventaja decisiva sobre el que no, porque tiene más herramientas a su disposición. Muchas veces te encuentras con que dices "hago esto y tal" y el rival no tiene ni idea de lo que estás haciendo, como funciona, ni desde luego había previsto que pudieras hacerlo; y a veces eso desmonta una estrategia. Esto es un problema que tenemos y que quizás se solucione con el tiempo, mientras tanto, como el reglamento más o menos lo controlamos 3-4, pasa esto y cosas como que se lleven años jugando una regla mal y nadie se de cuenta (ejemplo de las 3 bajas a disparo para intentar matar general).
Así, se mezcla esto y a veces alguien se ve arrasado sin remedio y piensa "no me gusta el juego" y "este tio es un culoduro que me humilla", y en realidad es un poco problema de desconocimiento. Que nadie se lo tome como una crítica, es normal, sólo 2 o 3 tenemos este juego como juego principal así que es nuestra responsabilidad intentar enseñar a la gente que al fin y al cabo no tiene tanto tiempo para dedicarle. Creo que a veces los que controlamos un poco más deberíamos ir dando pequeños consejos u observaciones durante las partidas, aunque nos perjudique en el resultado final, para que las cosas se vayan quedando. Bueno, creo que de hecho ya lo hacemos, salvo despiste.
Pero claro, luego está el punto en el que se buscan los resquicios en que este juego se sale de la lógica histórica y rompe las partidas. El caso más evidente son las máquinas de guerra. 4 balistas/cañones, o incluso sólo 2, destrozan caballerías pesadas o unidades de élite como seguramente no lo hacían en la realidad ni de lejos, y no hay que ser un maestro de la estrategia para usarlas. No es desde luego nada parecido a lo que pasa en 40k, pero desequilibra porque aunque se puede evitar, al que le vuelen una unidad de 500+ puntos en 2 turnos no le va a parecer la situación más divertida de su vida. Esto lo hemos aprovechado unos cuantos, y la verdad, yo en particular no me siento especialmente orgulloso, aunque aclaro, frente a estas situaciones hay némesis y también formas de contrarrestarlo.
Lo mismo se pueden nombrar otros casos, que se yo, ejércitos de open order de disparo plantados en montones de terreno difícil con cobertura, imposible avanzar contra esto ni ganar a intercambiar disparos (aunque este ejército en particular no se puede jugar de muchas más maneras), ballesteros/arcabuceros plantados detrás de muros o incluso en formaciones de shieldwall y a esperar que el otro se suicide viniendo a por ti, múltiples elefantes contra ejércitos que no pueden hacerles frente (aunque bueno, los cañones se lo pasan pipa contra estos bichos) etc...
Es muy delicado ajustar donde acaba la buena estrategia y empieza la destrucción de la diversión; cada cual tenemos nuestro punto. Un escenario en el que dos ejércitos se lanzan hacia adelante a pegarse de frente y que gane el que más mano tenga tampoco es muy divertido, pero uno en donde los dos maniobren con algunas unidades al ataque, mantengan otras en defensa, disparen a algunos objetivos e intenten vencer a otros en cuerpo a cuerpo, creo que es el ideal de este juego y lo que de verdad lo hace divertido.
Fin del tocho post de momento
