Bueno, mas o menos por donde iba yo. Lo que no me convence tanto es lo de aumentar los puntos a los demas, mas que nada por un tema de practicidad, los torneos a 1999 puntos han dado problemas porque la gente tiene que pintar cosas para el torneo en concreto, y aun con meses de antelacion no llegan. Con esos 250-500 puntos extra puede pasar algo parecido, aunque quizas menos, a partir de 2000 puntos se tiene la opcion de llevar las mismas cosas pero mas cebadas. Ahora entiendo por que en Warseer hay tantas listas a 2250 puntos...
De todas formas ayer estuve maquinando otras opciones, sin tocar la base. La idea-trasfondo seria que los demonios solo funcionan a plena efectividad cerca o en el mismo reino del caos, conforme se vayan alejando pierden fuerza. Y en el ambito de un torneo/liga, es de suponer que las batallas no fueran en el reino del caos... Al grano:

-1d3 de liderazgo a todas las unidades de demonios: En funcion de lo alejados que esten de su fuente de poder, los demonios pierden estabilidad. A efectos de juego esto no les limita potencial ofensivo, pero reduce una de sus mejores caracteristicas, su aguante insano en las peores condiciones. Ademas determinados efectos/hechizos podrian sacar buen partido de esto (lamento de la doncella espectral, por ejemplo), dando asi algun resquicio al rival por donde atacar.

Las armas magicas anulan la salvacion especial de los demonios (no asi la magia o los etereos): Es de suponer que enfrentados a demonios en defensa de sus hogares, las demas razas intentaran forjar armas capaces de dañarlos. A efectos de juego esto los equipara un poco a los espiritus del bosque, y les añade otro punto debil y una forma de que el rival tenga otro resquicio que aprovechar. No he incluido la magia para anular la especial porque al fin y al cabo toda magia proviene del reino del caos, por lo que es de esperar que los demonios sean resistentes a ella, y tampoco a los etereos, porque no le veo mayor sentido y ademas la mayor parte de los etereos son de los condes vampiro, uno de los ejercitos que pueden plantar cara ya de por si a los demonios.

Los enemigos obtienen 1d6 repeticiones de liderazgo para usar durante la partida: Esto indicaria un aumento de la determinacion por defender sus hogares o de costumbre de luchar contra demonios de los enemigos, si es que llegaran a invadir zonas como el imperio o bretonia. A efectos de juego, intenta dar un poco de cancha a los demas ejercitos contra uno en el que todas las unidades causan miedo y que ademas puede ser devastador a efectos psicologicos (Slaanesh); los demonios son tremendamente fiables a efectos psicologicos, sus rivales no, por lo que pense en equilibrar un poco las cosas. Esto no beneficia a los no-muertos ni a los inmunes a psicologia, pero estos ejercitos tampoco necesitan esa ayuda a este respecto.

Los portadores de plaga regeneran a 5+: Nurgle no opera con tanta fuerza en zonas de menor corrupcion, alejadas del reino del caos. A efectos de juego, es obvio, a la mayoria de la gente se le atragantan las regeneraciones de los portadores, asi se suaviza un poco el asunto.
Por supuesto en partidas entre demonios, no se aplicaria nada de esto. Son un poco ideas generales, si os gustan se podrian desarrollar mas o de otra forma distinta.
Me vais a tener que perdonar la frikada
