Bueno, bueno, me alegra iniciarte en el maravilloso mundo de la redirección. Tiene muchas variantes, según con el objetivo con que lo hagas, (uno de los mejores nombres es la del pim-pam).
La cosa consiste en que cuando tú rival tiene una unidad tocha (tipo 5 caballeros elegidos), y sabes que no le puedes ganar por frente, lo que se hace es, poner tu unidad no-hostigadora más barata (te interesa que sea lo más barata posible (<60 puntos)) así:
El enemigo tiene dos posibilidades, cargar o no hacerlo.
Si no lo hace, pues se queda quieto un turno más (es lo que queremos, porque ya que no la vamos a matar, por lo menos que sólo mate las unidades que le tiremos nosotros).
Si carga, pueden pasar dos cosas:
- Que tengas una unidad libre por ahí para cargar por el flanco (jugada del pim-pam):
En este caso puedes quedarte con la unidad redirectora, pero él intentará escapar de la carga por el flanco arrasando; o bien puedes huir (él moverá entre fallida y toda la carga si te consigue pillar la unidad). Luego cargas por el flanco.
- Si no tienes dicha carga, tienes que huir siempre, porque con un poco de suerte te pilla, y mueve 40 hacia un sitio donde no tienes ninguna unidad, con lo que el turno siguiente no cargará (y si somos buenos jugadores el turno siguiente tampoco), con lo que cuando consiga cargar será el 5º turno, y hasta ese momento sólo habrá matado tu unidad (Redirección pura).
Hay muchas maneras de jugar esto, pero lo importante es que tengas unidades baratas, que puedan huir (como echo de menos los necros), o que no sean hostigadoras (lobos por 40 puntos).
Con esto te puedes echar buenas risas.