Yo me ratifico en que el mayor problema no son las reglas o como de compensados están los ejércitos (aunque también sea de la corriente de Doc en este aspecto) sino la logística.
Me repito.
- Corregir listas con aliados puede ser un infierno para la organización porque eso supone que todo el mundo que corrija listas tenga acceso a todos los codex y que además sepa qué es válido y qué no en cada uno de ellos.
- La escenografía es algo fijo. Resulta materialmente imposible modificar 40 mesas cada ronda de juego para que cada jugador pueda incorporar sus fortalezas. Imaginaros una partida en la que los dos participantes se traen su fortaleza de redención (o como se llame). No iba a ser absurdo dos castillos enfrentados en 60cm? :S